Para estas dos imágenes tomadas en la sierra de Jubierre, entre Sariñena y Castejón de Monegros (Huesca). No nos olvidemos de que este lugar fue en la Era Terciaria el fondo de un mar.
¡¡¡Y pensar que hay quien considera que estos lugares son desiertos sin valor!!! (Y se atreven a "salvarlos" con proyectos pensados con mentalidad urbana).
En fin, Vicente. Sólo se me ocurren dos posibilidades. Te contesto con la primera, y si "fallamos" lo intentaré con la segunda, y ni una más Segismunda. Esta:
ResponderEliminarla "espartana" LYGEUM SPARTUM, o sencillamente ESPARTO
...y ya me aparto.
"Sastamente" ...
ResponderEliminarJV
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ResponderEliminarEn las estepas, en el desierto, HABLA más el cielo y el silencio del paisaje que su propio suelo, sin embargo, y a propósito de ello, el suelo, en la dureza de su aspereza, en esa sal de su desolación, en la severidad de su aparente "atonía", la VIDA que ahí arraiga pretende decirnos más de sí misma, a primera vista, que acaso la de esas otras exuberancias de naturaleza más verde y manifiesta; más que esa fiesta de alcahueta ecología y patente biología: esos sotos, esos bosques, y más aún, esas selvas que tanto extenderán sus frondosidades y tanto las elevarán, pareciendo como si su voluntad más intrínseca fuera la de robarle realidad y espíritu al cielo; cielo que habrá de ser más cielo, precisamente a la hora de mostrarnos la rala y raída corteza de ese suelo que él mismo asola e ilumina con su aire y con su luz, dotándolo de alma tan vital como real: SOLAR necesario (¿de los que mal se venden, o "bien-se-vendan" -del verbo "vendar"-?); solar necesario para lo que es nuestro; ese lado, ese lugar, ese rincón nuestro, también, DE lo estepario.
Ivitándonos J.Vicente, pues, a ponerle título a esta última -tan monegrina- entrada, y, ocurriédoseme a mí que el TAL podría girar en torno a la siguiente idea: "Suelo y Sol de la estepa: solar también de Vida" / Seguro que J.Vicente ya tiene mejor y más sintética ocurrencia a la hora de comprimirlo [que "lo bueno -desde Vicente-, si breve, dos veces bueno"]; no obstante el título "SIN TÍTULO" ya es en sí muy apropiado, que este tipo de territorio para nada necesitaría de la más mínima y sugerente (SEDUCTORA) pancarta titular. No vaya a ser que empezáramos a poner de moda este tipo de lugares. Lo de "turismo-verde" es una entelequia, una necia fantasía; a ver si nos vamos atreviendo a ser más "verde-s" y menos "turismo-s"; a ver si es que al final se nos fuera a ocurrir la urbanitísima idea de hacer -por ejemplo- un "Centro de Interpretación" en medio del ajo, muy en onda de IMAGEN ACTUAL, o sea, muy en lo más sofisticado de la típica psicodelia naturalista bien tele-tecnologica y electro-industrial. Pero claro, algo habrá quu hacer (INVENTAR), pues mucho más energúmeno en lo devastador va a ser lo del mastodóntico proyecto que todos sabemos: esa "couprier-landia" (¿disney o PLAY quéee?) del endiosado Don-sin-ton-ni-son-Dinero para lo más lelos entretenimientos del aburrido personal, no personal de lo urbanita -¡qué mas quisiéramos!-, sino de los más paleto y bellotero de la urbe, del orbe.
Acórdemonos siempre de que la conciencia naturalista y ecológica (versión ISTA incluida) ha nacido de la urbe, es hija de la CIUDAD. Y así SEA, como tiene que ser siempre. Otra cosa habrá de ser, que ya lo hemos dicho otras veces, qué clase de ciudad y conciencia de ciudad (ciudadanía) queremos, porque sólo cuando lo tengamos claro de verdad sabremos al fin qué clase de NATURA queremos y PODRÁ SER POSIBLE.
GRACIAS*
Jose Mª:
ResponderEliminarla primer foto la titularía "TETA MONEGRINA",sin comentarios...y la segunda "CON LA PACIENCIA HABEIS TOPADO" ya que refleja un lugar desierto, arido, INTERESANTE... pero sobre todo PACIENTE.
¿Habrán, invertido ahí -¡oh teta monegra!- los magnates de "SILICON VALLEY?
ResponderEliminarYa estoy viendo en el despacho del jefe del monstruo de la movida esa TETA enmarcada a todo trapo: con maciza rubia en trapitos-pitos o sin trapitos-titos subida a ese pezón culminante: ¡HAGAN JUEGO! ¡HABRAN FUEGO!
Pero eso..., ¿SILICON-HADA?