Mañana gélida que comenzó al salir de casa en Monzón a -4,8º C a las 7:30 h y se puso más ruda en Jánovas, cuando empezamos a caminar a -7,5 º C. Los dedos (al menos los míos) sufrieron toda la mañana. Pero, a pesar del frío, nos deparó un recorrido muy interesante de unos 12 kilómetros por algunos de los pueblos de la ribera del Ara, el único río del Pirineo aragonés sin embalses, afluente del Cinca
Té de roca (Jasonia saxatilis) con las "flores de hielo" que ya vimos el año pasado en la sierra de Guara. Su formación es muy curiosa. Se originan en un momento en el que el suelo no está aún muy frío, pero el aire sí. La intensa helada produce grietas en la corteza de los tallos, por donde la savia va escapando a través de poros y se hiela al instante, produciendo unas extrusiones con formas caprichosas, que se fundirán o sublimarán en cuanto les dé el sol
Puente colgante sobre el Ara, que lleva hasta Jánovas
Río Ara
Algunos de mis compañeros de caminata cruzando el puente de Jánovas sobre las tablas cubiertas de escarcha
Víctor fotografía un charco helado
Tallos de Sedum cubiertos de cristales de escarcha
Ligustrum vulgare abunda en las orillas del barranco de Las Viñas
Jánovas tuvo que ser abandonado a la fuerza por las presiones de la compañía eléctrica Iberduero, que tenía la concesión para construir un embalse sobre el río Ara. Hace unos años se abandonó el proyecto definitivamente y las tierras y propiedades están siendo revertidas a los antiguos habitantes que así lo deseen.
Para saber más, http://www.pueblosabandonados.com/2009/07/la-historia-de-janovas.html
La fuente del pueblo, con dos serpientes entrelazadas
Una de las calles de Jánovas, que me producen una sensación de desolación
Vivienda de Jánovas en proceso de reconstrucción
Dura helada sobre las ruinas de Jánovas
Pinturas murales de la iglesia
Hielo y hojas de Quercus subpyrenaica
La retama Genista ausetana es frecuente a lo largo del camino que conduce hasta Lacort y Albella
Claro de quejigal con Genista ausetana. Al fondo, Nabaín o Santa Marina (1.799 m)
Escarcha sobre las hojas del camino: Sorbus domestica, Quercus subpyrenaica
El río Ara y un cortado en las margas o "terreros", con la Solana de Burgasé al fondo
Río Ara desde el puente colgante de Lacort
Ganado vacuno en la ribera de Fiscal
El Cotiella nevado asoma por detrás de la Peña Montañesa, desde un ángulo inusual. En primer término, el quejigal instalado sobre las margas eocenas
Casa Arana de Albella
Albella tiene 14 habitantes censados
Fuente helada y diente de león
Una borda con el Cotiella y la Peña Montañesa como telón de fondo
Camino de Planillo se divisa el núcleo habitado de San Felices de Ara. Al fondo, el macizo del Cotiella
Planillo. Chimeneas con los riscos de los Sestrales reconocibles detrás
Crucero junto a la iglesia del pequeño núcleo de Planillo, donde viven 9 personas. Pertenece al municipio de Fiscal
Barranco de la Viñas camino de San Felices de Ara
El liquen Diploschistes ocellatus sobre roca arenisca
Planillo se sitúa a 870 m de altitud
Filigranas de hielo
Talud margoso y quejigal en el barranco de las Viñas. El quejigo (Quercus x subpyrenaica) tiene hojas marcescentes, que permanecen secas en el árbol durante el otoño y buena parte del invierno
Hielo en el pequeño barranco de San Felices de Ara
Una cabra en el barranco de las Viñas
En San Felices de Ara hay censadas 13 personas
El tamaño de las chimeneas indicaba el poderío de cada casa
Escudo en una casa de San Felices
Saliendo de San Felices hacia Jánovas
Vacas y terneros pastando en San Felices de Ara
La Peña Canciás se alza sobre la ribera de Fiscal hasta los 1.928 m de altitud
Sobre Jánovas, los prados abandonados han sido colonizados por una impresionante masa de rosales silvestres (Rosa canina)
Rosales y sus "tapaculos" rojos. En mayo la floración debe de ser como para venir a verla
Pista hacia Jánovas, todavía con escarcha a las 13 horas
Llegando de vuelta a Jánovas
Jánovas y el monte Nabaín, que geológicamente se conoce como "anticlinal de Boltaña"
Jánovas, sin palabras
El techo de la nave de la iglesia también ha sido colonizado por la vegetación
Rosa canina y pequeño "forau" en el estrato vertical de arenisca
En los últimos metros de la caminata volvemos a franquear el río Ara
Árboles tumbados por una de las últimas riadas del Ara, al que no sujeta ningún embalse en todo su recorrido desde que nace en el valle de Bujaruelo hasta su confluencia con el Cinca en l'Aínsa, después de recorrer 70 Km
Una última imagen del Ara antes de quitarnos las botas
Hola José Vicente, colaboro en una sección sobre blogs de Aragón en la Cadena Ser (una vez al mes) y me ha encantado el tuyo. Me gustaría contactar contigo para hacerte una pequeña entrevista. Te dejo mi mail por si puedes escribirme y pasarme un teléfono donde localizarte. eva.hinojosa@gmail.com (un saludo y enhorabuena por el blog)
ResponderEliminarQué bonito, me ha encantado :)
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