Virgen del Monte y San Victorián (Abizanda, Sobrarbe), 19 de abril

Sábado 19, dos excursiones desde Escanilla; la de la mañana, andando, hasta la Virgen del Monte; y la de la tarde, en coche hasta la la ermita de San Victorián

 Nada más empezar a caminar y sin salir del pueblo, me encuentro con dos ejemplares de la mariposa nocturna más grande de Europa, Saturnia pyri (Gran Pavón Nocturno)

 Tiene un grueso abdomen, patas robustas y carece de espiritrompa

 Puede alcanzar una envergadura de 15 cm

 Escanilla visto desde el camino hacia la Virgen del Monte

 Castillo de Escanilla, una torre de señales medieval

 Lo que yo llamaría un "rincón de socialización" junto a la ermita de la Virgen del Monte, donde los lugareños y allegados se han venido reuniendo durante generaciones para comer (torta de caridad, almendras) y beber (vino en porrón), después de las ceremonias religiosas

 Carrasca (Quercus ilex) decrépita, debilitada por el ataque de insectos, con las Tres Sorores nevadas al fondo

 Tejido en una zona del tronco de la vieja carrasca, allí donde ya ha perdido la corteza

 Ruscus aculeatus, flor y fruto

 Líquenes cortícolas y marca de GR

 Epipactis, probablemente E. tremolsii

 La "chunqueta" (Aphyllanthes monspeliensis)

 Arum italicum junto al núcleo urbano de Escanilla

 La ermita de San Victorián (o San Beturián) de Abizanda, donde tiene lugar el domingo más próximo al 12 de enero la ceremonia de los "langostos" (saltamontes), para predecir cómo será ese año la cosecha

 Situada en la sierra de Arbe o de Olsón, a unos 850 m de altitud, desde la ermita de San Victorián el panorama es excepcional. En la imagen destacan la mole rocosa de la Peña Montañesa y el embalse de Mediano

 Hacia el este puede verse el Turbón, de 2.492 m de altitud. También se distingue bien el pueblo de Troncedo

 Panorama desde San Victorián, con paisaje cercano en el que abundan los pinares y carrascales, y el monte huele a romero y tomillo

 Polypodium cambricum en una grieta sombreada de conglomerado

 Porche de la ermita de San Victorián

Abizanda al atardecer, con nubes y viento que hacían presagiar la lluvia que cayó al día siguiente